En una breve síntesis queremos compartir lo que hemos vivido como familia pastoral de la Segunda Iglesia Alianza Cristiana y Misionera de Coyhaique, en este último tiempo a causa de la crisis que ha estado viviendo nuestra amada Patagonia.
Muy agradecidos por las oraciones de cada hermano que ha intercedido por nosotros y sin duda, por cada colega y hermandad de la región, ya que ello nos ha dado la fuerza para seguir en la obra que Dios nos ha llamado.
No ha sido fácil acostumbrarnos a la etapa que estamos viviendo, ya que al regresar a Coyhaique, después de nuestras vacaciones, nos encontramos con una ciudad totalmente desabastecida, sin alimentos, sin combustibles, etc., pero lo más fuerte fue encontrar una ciudad destruida, con mucha violencia, gente atemorizada por las serie de barricadas que se realizaban cada noche, saqueos tanto a negocios como a casas, árboles cortados, muchos hermanos sin poder trabajar por la falta de combustible, lo que significa no tener como alimentar la familia, etcétera. Sería largo y triste de relatar cada día vivido en medio de esta crisis, sin embargo las experiencias, las lágrimas derramadas, las restricciones que estamos experimentando, sobre todo por la falta de alimentos, nos han hecho otra cosa que ayudarnos a amar de todo corazón a nuestra Patagonia, a nuestra gente, a nuestra iglesia. Absolutamente nadie ha escapado a esta triste realidad, ricos y pobres, grandes y chicos, pastores y laicos, observan impotentes como peligra su estabilidad económica y laboral. Sin embargo Dios ha sido fiel y hemos hecho realidad en nuestras vidas Su Palabra que dice: “Aunque la higuera no florezca, ni haya fruto en las vides; aunque falte el fruto del olivo, y los labrados no den mantenimiento; y las ovejas sean quitadas del redil, y no haya vacas en los corrales; con todo yo me alegraré en el SEÑOR, me regocijaré en el Dios de mi salvación.” Habacuc 3.17-18
Quisiéramos dejar con ustedes algunas peticiones de oración:
- Que mi Dios tome control y volvamos pronto a la normalidad.
- Por la paz de nuestra ciudad.
- Por la iglesia para que Dios restaure sus corazones, hay mucha tristeza, dolor por lo ocurrido, cansancio de una espera que no tiene solución, por estabilidad emocional
- Por los estudiantes que ya comenzaron las clases pero no se sabe hasta cuándo, porque todo depende de las decisiones que tome el gobierno.
- Por la iglesia y sus proyectos; especialmente en el área financiera, ya que muchos hermanos no han podido trabajar y escasea el sustento, hay niños sufriendo.
- Proyecto de compra de una casa pastoral.
- Por el proyecto evangelístico de plantar una nueva iglesia, en el sector alto de Coyhaique.
TU PROBLEMA ES MI PROBLEMA
Esa es la frase que se lee por todos lados, más que un slogan es una realidad… todos compartimos lo que tenemos: unos a otros nos ayudamos a llevar las cargas y gracias a vuestras oraciones se han hecho más llevaderos los días y las noches en medio de esta difícil situación. Dios les bendiga.
No hay comentarios:
Publicar un comentario